Cuidando el jardin interior

A menudo las personas que pasan por mi consulta me cuentan que tienen miedo de estar solas, de su propia compañía. Que harían cualquier cosa con tal de evitar una velada a solas. Otros clientes me cuentan que, a pesar de no temer estar solos, lo encuentran la opción más aburrida, y casi no saben cómo ocupar el tiempo, aparte de viendo la tele o leyendo una novela. Otros comentan sentirse incómodos a solas y, por lo tanto, lo evitan.

Estas tres alternativas nos llevan a la misma conclusión: si es así como te sientes con el hecho de estar a solas contigo mismo, de alguna manera no estás conectado a ti mismo y, lo que es más importante, no tienes una relación real contigo mismo, por lo que probablemente no te conoces a ti mismo (lee también Eligiendo Alternativas: Haciéndonos Responsables por Nuestras Vidas).

¿Qué importancia tiene todo esto?

Casarte con alguien a quien temes

Imagina que te casaras con alguien con quien temes quedarte a solas, alguien con quien evitas pasar una velada a solas. Imagina que te casaras con una persona tan aburrida que no querrías pasar tiempo a solas con ella. O imagina que te casaras con alguien en cuya compañía te sientes incómodo y por lo tanto, evitas a esa persona.

Suena como una broma de mal gusto, ¿verdad? Preferirías correr 15 km antes de casarte con alguien así. Harías cualquier cosa para no tener que pasar tiempo con esa persona. No obstante, esa es la situación en la que nos encontramos con nosotros mismos cuando no reconocemos el valor y la importancia de establecer una relación con nosotros mismos que nos haga disfrutar de nuestra propia compañía, encontrar en nosotros un compañero interesante del que siempre podamos aprender algo nuevo, y que siempre pueda llevarnos a niveles de comprensión cada vez más profundos; alguien cuya compañía resulte divertida y emocionante... a solas.

Conjunctio: ¿estás interesado en ti mismo?

¿De verdad? ¿Realmente es posible una relación así con uno mismo? Básicamente se reduce a lo que Jung denominó conjunctio o, en otras palabras, el encuentro de dos partes separadas del yo (generalmente inconscientes) en el proceso de convertirse en un todo o de unirse y, al hacerlo, transformarse.

Sin embargo, el hecho es que todo esto suena a un montón de palabrería psicológica. ¿Quién puede contemplar superar algo que parece un obstáculo tan difícil? Y, de todos modos, ¿quién tiene el tiempo y el dinero de seguir una terapia con el fin de aprender todas esas cosas y explorar el pasado oscuro de la propia infancia? En realidad, no es tan difícil, e indudablemente no depende de si vas o no a terapia. Tiene mucho que ver con tomar consciencia del yo, con un deseo de conocimiento del yo, y con la aceptación de la responsabilidad de uno mismo. O sea, que básicamente tiene mucho que ver con cuánto te interesas a ti mismo.

Individuación y llegar a ser lo que realmente puedes llegar a ser

Jung, que aportó la idea del ser humano integral y holístico, dijo que en lo que consiste realmente el proceso de individuación es en llegar a ser lo que realmente podemos llegar a ser, creciendo hacia lo que es inherente a nosotros al nacer.

Abraham Maslow, que propuso la jerarquía de las necesidades, dijo que para que lleguemos a autorrealizarnos necesitamos llegar a ser todo lo que somos capaces de llegar a ser.

Joseph Campbell, el mitólogo, dijo que debíamos perseguir nuestra felicidad.

Aburrirse con uno mismo

Todos estos conceptos se refieren de algún modo al autoconocimiento, pero también al sentido. (Ver también Buscando un Significado Para tu Vida: Un Paso Importante Hacia la Libertad Personal). Uno sólo puede aburrirse consigo mismo si la vida carece de sentido, si todavía no se ha molestado en pensar qué sentido podría darle a su vida. No voy a profundizar más en este tema, ya que ha sido tratado con detalle en el artículo mencionado más arriba, pero te animo a explorarlo con el fin de comenzar a comprender cómo encontrarle un sentido a tu vida.

El temor a encontrarte a solas contigo mismo

Si temes encontrarte a solas contigo mismo, a lo mejor sientes que hay tanto en ti que odias o desprecias o juzgas o criticas, que el hecho de pasar tiempo contigo mismo es simplemente... una opción peligrosa. En otras palabras, estar con alguien por quien tienes esos sentimientos tan negativos resulta atemorizante. Por lo tanto, ¿no tendría sentido llegar a conocer a esa persona que eres tú, por dentro y por fuera, y limpiar, si fuese necesario, todas aquellas partes que son censurables? O mejor aún, llegar a darte cuenta de que, de hecho, no son tan censurables, y que en realidad tú eres una persona agradable con la que estar? Pero esto sólo es posible si viajas a tu interior con el fin de empezar a conocerte a ti mismo... O más importante, con el fin de comenzar a amarte a ti mismo.

Muchos de los sentimientos difíciles que pudieses tener hacia ti mismo pueden ser abordados usando el “barómetro energético” al que me refiero en el artículo El Barómetro Energético: Conseguir que la Conexión Cuerpo-Mente de dé Resultados. Cambiando tu vibración energética o, en otras palabras, haciéndote sentir mejor deliberadamente te llevará automáticamente a otros niveles donde tus pensamientos y sentimientos hacia ti mismo cambiarán. En estos niveles más altos, a los pensamientos negativos o de baja energía les resulta mucho más difícil encontrar un caldo de cultivo. Cuando te sientes bien, ¿con qué frecuencia te sumerges en la espiral descendente de pensamientos negativos? Cuando te sientes bien, no tienes ganas de llorar. Por ello, te animo a que empieces a practicar el cambio de tu vibración energética a un nivel más alto cada día, cada vez que te des cuenta de que entras en la espiral descendente.

Sentirse incómodo con uno mismo

Si te sientes incómodo contigo mismo, podría tener mucho que ver con el hecho de que sencillamente no posees mucho conocimiento de ti mismo, y por lo tanto esa incomodidad es similar a como te sientes con un extraño del que sabes poco, y que por tanto no crea la sensación de comodidad y relajación e intimidad que crean los buenos amigos. ¿No tendría sentido intentar convertirte en tu mejor amigo? Además, haciéndolo empezarás no sólo a apreciarte a ti mismo, sino también a gustarte y quererte más. Incluso a admirarte más. Imagina pasar todo tu tiempo con un amigo así... Y ese amigo ¡eres tú!

Cuidar el jardín interior

Anteriormente mencioné que este proceso no tiene que ser difícil ni tedioso, y que ciertamente no requiere los servicios de un terapeuta. Lo que sí implica es algo parecido a la jardinería. Cuando plantas una semilla en el jardín de tu casa, o en una maceta en tu terraza, sabes muy bien que, para que crezca hasta convertirse en un fuerte roble, en una palmera elegante que se mece al viento, en una rosa, en romero de dulce aroma, o en un florido y perfumado hibisco, primero necesita tierra (preferiblemente rica), agua, luz solar, cuidados y constancia. El jardín interior no es diferente.

Enriquecer la tierra

Posiblemente la tierra en la que estás comenzando tu proceso de crecimiento no sea especialmente fértil en este momento. Sabes que ahí fuera, en el mundo exterior, puedes crear un montón de abono con el fin de enriquecer la tierra que usas para tus plantas. En el mundo interior puedes empezar a alimentar tu tierra (mente, corazón y alma) leyendo y revisando material que se convertirá en un estupendo abono, en lugar de ensuciar tu jardín con restos de comida basura y desperdicios plásticos (los cuales podrían compararse, en el nivel interior, a los shows de los medios de comunicación de masas y a los libros o revistas que a mucha gente le gusta leer como dieta habitual, aunque carezcan de toda posibilidad de convertirse jamás en tierra rica).

Si quieres pistas más concretas sobre estas ideas, echa un vistazo a mi blog, especialmente la entrega del 25 de febrero de 2015: ¡Mantén alta tu energía! Vigila cómo alimentas tu cerebro, tu corazón y tu espíritu, para que comprendas mejor el concepto de mantener la tierra rica en tu jardín interior. Lee también los últimos párrafos de la entrega del 29 de abril de 2007 de mi blog en inglés: Baelo Claudia: Roman Ruins and the "Now" (solo en inglés). Cuida bien de tu jardín y observa el proceso exuberante de tu propio crecimiento interior que tendrá lugar. Sólo tú puedes hacer esto por ti, y sólo tú puedes tomar la decisión de empezar ahora...

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Échale un vistazo también al portal de mis libros: www.gabriellakortsch.com donde podrás bajar extractos y citas de mis libros en español, inglés y alemán). Mi último libro  Emotional Unavailability & Neediness: Two Sides of the Same Coin ya está a la venta en todo el mundo en Amazon en formato de bolsillo y E-libro para Kindle. También se puede adquirir (igual que los demás libros míos) en Barnes & Noble.

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